El antes y el ahora.
Antes. Ahora. Los rizos en mi cabello han desaparecido, aquel tono claro también. Ahora llevo el cabello mas lacio que ondulado y café. Otras partes de mi también se han ido, como la ingenuidad y la inconciencia, sin embargo, creo que en el fondo sigo llevando esa ingenuidad e inocencia incrustrada debajo de cada poro de piel, aunque claro ya no es lo mismo, porque he aprendido de los errores de los años anteriores. Antes, quería comerme el mundo como creo la mayoría de las personas que tiene sueños lo ha deseado alguna vez, triste ha sido darme cuenta que los sueños no son tan fáciles de alcanzar pero no tan difíciles de lograr como para renunciar a ellos. Confío en que la perseverancia me ayudará a ver mis sueños hechos realidad algún día. Ahora he aprendido que debe existir un balance entre la mente, los sueños, la realidad, el corazón y la razón, que debe seguir existiendo ingenuidad en nosotros para intentar una y otra vez alcanzar las metas propuestas. El ahora nos enseña a ve...